El primero de los Sanguily

Por: Lázaro Numa Águila

Guillermo, Julio y Manuel, los hermanos Sanguily.
Guillermo, Julio y Manuel, los hermanos Sanguily.

En la historia de Cuba hay familias que le han aportado más de un nombre significativo. Algunos vinculados a la cultura, a la música o al deporte, otros a hechos patrióticos y también existen algunos que han sobresalido por estar relacionados con historias oscuras. Si menciono el apellido Sanguily, cualquier cubano evoca inmediatamente a la familia que aportó más de un miembro a nuestras guerras independentistas en diferentes funciones y con posterioridad a la política republicana, pero pocos pudieran asociar el apellido a otros relatos, incluso en el extranjero.
Julio Sanguily y Mary Garrite llegaron un día a Cuba desde el vecino Haití. Él era de origen francés y ella de ascendencia irlandesa. Formaron una familia de tres hijos: Guillermo, Julio y Manuel.
La pareja no duró mucho tiempo, el padre murió temprano. Los pequeños quedaron a cargo de su padrino, un hombre de apellido Murdoch. Los tres fueron enviados a estudiar a los Estados Unidos. Ya crecidos y con estudios, los menores regresaron a Cuba, pero Guillermo permaneció en la nación norteña.
Julio y Manuel se vincularon a la contienda revolucionaria iniciada en 1868. Ambos alcanzaron altos grados militares. El conocido hecho protagonizado por el mayor general Ignacio Agramonte, el 8 de octubre de 1871, cuando con solo treinta y cinco hombres se enfrentó a las fuerzas del comandante del ejército español César Matos, para rescatar a su brigadier “vivo o muerto”, reconocido como “El rescate de Sanguily”, fue nada más y nada menos que para salvar a Julio de las garras del enemigo español.
Manuel se incorporó a la Guerra de los Diez Años el 17 de enero de 1869. En poco tiempo ya era el secretario del mayor general Manuel de Quesada. Fue elegido por la Asamblea de Representantes del Centro para presidir la comisión que unificaría la dirección de la revolución y establecería el tipo de gobierno de la República en Armas. En 1869 ya ostentaba el grado de teniente coronel. Se mantuvo como representante a la cámara de la República en Armas desde 1874 hasta agosto de 1875 y luego se incorporó a las fuerzas de Máximo Gómez para la invasión a Las Villas. Bajo el mando de Gómez alcanzó el grado de coronel, hasta que en 1877 fue transferido a las órdenes de su hermano Julio. Los dos habían sido designados para salir al exterior y organizar expediciones hacia Cuba. Manuel no participó directamente en la Guerra de 1895, pero cumplió algunas tareas importantes fuera de la Isla.
Elegido delegado a la Asamblea Constituyente y en 1902 senador por la provincia de Matanzas, fue el primer presidente del Senado el 20 de mayo de ese año. Después de desempeñar cargos administrativos de importancia en diferentes gabinetes de Gobierno, se retiró de la política activa en 1917 y murió de causas naturales ocho años más tarde, el 23 de enero de 1925, en su ciudad natal, La Habana.
¿Cuál fue el destino de Guillermo? Hace algún tiempo leí en Cuba un trabajo donde se aseguraba que el primer alcalde de la ciudad de Sydney, en Australia, había sido un cubano de la familia Sanguily. El relato me llamó profundamente la atención, sobre todo conociendo algo sobre la historia de ese país. Por tal motivo, comencé mis investigaciones sobre el tema. Sabía que estaría en la isla continente en poco tiempo, eso me facilitaría poder acceder a ciertas fuentes confiables desde “el mismo lugar de los hechos”. Dando por concluida la pesquisa, compartiré hoy mi versión de la historia con los lectores de Palabra Nueva.

Guillermo vivió entre 1862 y 1863 en Boston, donde estudió artes navales. Por algún motivo personal cambió su nombre por el de William y eliminó el apellido Garrite de su madre, tomando el Murdoch de su padrino y tutor. A partir de ese momento se llamó William Murdoch Sanguily. Se enroló en la tripulación del velero General Grant. El barco llegó a Melbourne, Australia, el 13 de marzo de 1866 según consta en los documentos de Capitanía Portuaria de la misma ciudad.
El General Grant volvió a zarpar el 4 de mayo de 1866. Llevaba entre su carga 2 500 onzas de oro, además de algodón, plomo, zinc y un número de pasajeros. Consta que William Murdoch Sanguily era el tripulante más joven de la dotación. El velero naufragó frente a las seis islas deshabitadas Auckland, próximo a la llamada Disappointment. Allí se mantuvo el mayor de los hermanos Sanguily algo más de un año, hasta que fue rescatado por un ballenero y llevado a Nueva Zelanda. Esta historia es muy conocida en Australia. El barco se ha intentado encontrar en innumerables ocasiones, hasta que fue declarado Patrimonio de la Humanidad y el gobierno de Nueva Zelanda prohibió todo permiso de búsqueda.

Conocido grabado sobre el naufragio del General Grant.
Conocido grabado sobre el naufragio del General Grant.

En 1872, William se encontraba en los Estados Unidos, en la ciudad de Filadelfia, este es un hecho confirmado. Contrajo matrimonio con Sara Dawes Randall, descendiente de australianos. La pareja decidió ir a vivir a Australia. Se radicaron en la antigua ciudad de Wolloomooloo, actual Sydney, donde tuvieron cinco hijos.
William invirtió en un negocio de coches tirados por caballos. Todo parece indicar que llegó a ser reconocido y de prestigio, pues son frecuentes las alusiones a él en la prensa de la época, incluso se pueden encontrar imágenes de exponentes de los carruajes de su compañía. También aparece vinculado al transporte de servicios funerarios.
Ya conocía algunas cuestiones importantes sobre William –o Guillermo–, pero había un tema que me seguía golpeando la cabeza, ¿fue el primer alcalde de Sydney realmente? Luego de buscar en la prensa australiana de la época y en Internet, nada había podido encontrar sobre el asunto. En la biblioteca de la Universidad de Adelaida me recomendaron recurrir a la alcaldía y a la casa de gobierno en Sydney. Sin demora y con la ayuda de un amigo, pedimos la información. Solo en unas horas respondieron con un amplio listado de los alcaldes que ha tenido la ciudad. William Murdoch Sanguily nunca fue alcalde de Sydney ni de ninguna otra ciudad en Australia, su nombre no aparece en ninguna lista. Todo en este sentido fue una gran fábula. En una nota adjunta se aclara que Rollings Herbert William, su único hijo varón, sí trabajó en la alcaldía, llegó a ser ayudante principal de varios de los más notables alcaldes de la ciudad y fue un hombre muy vinculado a los estamentos políticos de su época. Por la prontitud en la respuesta y la nota adjunta, parece que otras personas han investigado sobre el descendiente de la familia Sanguily.

Coches de la compañía Murdoch.
Coches de la compañía Murdoch.

Se puede pensar que la historia terminó ahí, sin novedad alguna, pero no fue así, resulta ser que en el proceso de búsqueda salió a la luz que William Murdoch trabajó con dos amigos, Matthew Boulton y James Watt, en el diseño y fabricación de motores de vapor. Ideó un pequeño prototipo de vehículo para demostrar que la fuente de energía podía ser utilizada en medios de transporte. El modelo original todavía existe y se conserva en el museo del transporte en Sydney. Esto significa que un cubano, sí fue precursor de la utilización de la máquina de vapor para el transporte en Australia.
Otra sorpresa la tuve al investigar sobre quiénes fueron los primeros cubanos que pisaron tierra australiana. William Murdoch Sanguily fue el primero en llegar y el primero en radicarse en el país. Esto indica que jamás renunció a su condición de cubano, así consta en los documentos oficiales. No entró al país ninguna otra persona nacida en la isla hasta 1930.

Diseño y prototipo del vehículo a vapor diseñado y construido por William Murdoch Sanguily.
Diseño y prototipo del vehículo a vapor diseñado y construido por William Murdoch Sanguily.

El primero de los hermanos Sanguily falleció en Sydney, el 6 de mayo de 1909 debido a un ataque al corazón. Fue enterrado el día 27 en el cementerio de Rookwood de la misma ciudad. Gracias a gestiones de la Embajada de Cuba en Australia, en el mes de marzo del año 2015, encontraron su tumba abandonada en el sector anglicano antiguo del propio cementerio.

Las historias de familias siempre son importantes en cualquier estudio de una personalidad, ellas son la célula formadora básica del individuo. Los Sanguily también fueron resultado de su trayectoria de vida. Guillermo –o William– por ser el mayor, debió haber tenido sus motivos para cambiarse el nombre y el apellido de su madre, persona de la que no aparecen otras referencias y, sobre todo, para no seguir a sus hermanos, pero no por ello dejó de ser un cubano y un Sanguily. Se desconoce si mantuvo algún contacto con Julio y con Manuel, pues estos dos estuvieron tiempos prolongados en los Estados Unidos. Sin duda se trata de una historia curiosa. William Murdoch Sanguily nunca fue alcalde de Sydney, pero sí fue un cubano, que sin renunciar a su condición, dejó profundas huellas en un distante país. Ω

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